¿Qué es la quiropráctica?
La quiropráctica es una terapia manual que se basa en un enfoque holístico del cuidado de la salud y apoya la propia capacidad del cuerpo para autorregularse y curarse. Su objetivo es prevenir enfermedades y mejorar la salud y el funcionamiento generales. En esencia, la quiropráctica se centra en el sistema nervioso, y su funcionamiento óptimo, mediante la eliminación de interferencias (que los quiroprácticos llaman «subluxaciones«) provocados por factores estresantes. Efectivamente, nuestro cuerpo a veces tiene que recuperarse de caídas o de noches de insomnio ocasionales, pero muchos factores estresantes forman parte de nuestra vida cotidiana sin que nos demos cuenta. Las malas posturas, la mala alimentación o el tabaquismo son también hábitos nocivos que el cuerpo debe superar. Los quiroprácticos consideran estos estresores físicos, químicos y emocionales como potenciales perturbadores, que llevan al organismo a compensar su nocividad a expensas del sistema nervioso.
En su práctica, los quiroprácticos prestan especial atención a la columna vertebral, ya que envuelve y protege la médula espinal, que es en realidad una prolongación del cerebro en nuestro cuerpo. Detectan y corrigen con mayor precisión las subluxaciones de la columna vertebral y pueden hacerlo utilizando diversas técnicas. Al perder su biomecánica correcta, las vértebras subluxadas suelen provocar interferencias neurológicas. Aunque cada técnica las aborda de forma diferente, todas tienen por objeto restablecer tanto el movimiento como la función.
La razón por la que es tan importante centrarse en el sistema nervioso es sencillamente porque es éste el que gobierna y controla cualquier otro sistema del cuerpo. Es nuestro sistema nervioso el que se encarga de los latidos de nuestro corazón, nuestra respiración, nuestra digestión, el equilibrio de nuestras hormonas e incluso nuestro estado de ánimo. Deja que tu sistema nervioso se exprese como necesita y tendrás la oportunidad de conocer la mejor versión de ti mismo.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿Para quién es la quiropráctica?
Los cuidados quiroprácticos están pensados para cualquier persona, desde bebés hasta ancianos, que desee cuidar su salud de forma natural. Todo el mundo debería mantener su sistema nervioso libre de interferencias y funcionando a un nivel óptimo. Cuando el sistema nervioso está libre de interferencias, el cuerpo puede curarse y prosperar.
¿Qué ocurre durante una visita quiropráctica normal?
La quiropráctica incorpora muchas técnicas diferentes que abarcan una amplia gama de enfoques terapéuticos con diferentes enfoques. Adaptaré el enfoque que utilice a las necesidades y objetivos de la persona de la mejor manera posible. La visita puede incluir ajustes y/o manipulaciones articulares u óseas, trabajo de los tejidos blandos, movilización de órganos, asesoramiento nutricional, asesoramiento sobre ejercicio, estilo de vida y asesoramiento psicosocial.
El ajuste mecánico:
La técnica más común entre los quiroprácticos consiste en «
alta velocidad y baja amplitud
» o «
empujes
» suministrado a articulaciones hipo-móviles con el fin de restaurar el movimiento a través de vectores específicos y cuidadosamente calculados. Esto se hace para estimular las neuronas sensoriales (que nos hacen sentir cosas) para que envíen señales al cerebro, y así restablecer la transmisión nerviosa óptima en todo el sistema nervioso. Como esta técnica induce movimiento en una articulación, es de esperar que la articulación cavite (haga un «
clic
«) seguido de una sensación inmediata de descompresión y alivio.
La cavitación:
Durante el ajuste, el quiropráctico puede realizar un empuje manual para corregir la biomecánica de la articulación subluxada. Puede producirse un chasquido, crujido o estallido, pero no es el sonido de un hueso que se desplaza o se rompe. Este sonido se denomina cavitación y es el resultado de la liberación de gas del líquido sinovial dentro de la cápsula articular debido a un rápido cambio de presión. A pesar de los mitos urbanos, el fenómeno de la cavitación no sólo es inocuo, sino beneficioso cuando se aplica a una articulación verdaderamente subluxada, ya que favorece la lubricación articular, el movimiento, la nutrición del cartílago y la entrada neurológica adecuada.